Objetivos realistas y referentes erroneos.
Vengo observando de un tiempo a esta parte y sobre todo en el foro inglés que con bastante frecuencia aparecen posts que hacen referencia a las medidas de actores porno con pollas gigantescas.
Siempre se discute si miden tanto o cuanto. Bueno, como mera curiosidad puede ser digno de mención. No obstante, a veces me pregunto si es positivo hacer referencia a estos individuos en un foro dedicado al alargamiento del pene. Me refiero, por ejemplo, a actores como los que se pueden ver en los clips de video de Megacock Cravers o Monsters of Cock, Mandingo, Lex Steel, Shane Diesel y similares.
Yo soy el primero en reconocer que me quedo alucinado cuando veo semejantes rabos. Es evidente que no son trucajes y el tamaño es una auténtica salvajada.
Desde luego, resulta de todo punto imposible conseguir un miembro de ese calibre por mucho PE que se realice.
Eso es así y no se puede hacer nada al respecto. Hay que aceptar que lo mismo que la naturaleza produce gente muy alta, también da lugar a casos de penes gigantescos como los que comento.
Uno de los problemas con el PE es que alguien se marque como referente a estos individuos a la hora de fijar sus metas. Esto es un error mayúsculo. Estos casos son fenómenos de la naturaleza y como tal hay que considerarlos.
Me he imaginado como me sentiría si tuviese un pollón de esas dimensiones descomunales. Pues estaría encantado. Nada me gustaría más en la vida, de hecho. Me da igual que todas las mujeres se espantaran al verlo o que tuviera que tener un cuidado extremo para no reventarlas a la que diese una embestida más fuerte de la cuenta. O que huyesen despavoridas en cuanto sintieran mi polla cerca de su culo. Me encantaría. Solo por el boca a boca, muchísimas chicas querrían estar conmigo, aunque solo fuera para verlo. Y en momentos de soledad hasta me podría hacer una mamada a mi mismo. La verdad es que siento una envidia tremenda cuando veo estos pollones. Así de claro.
Pero, por desgracia, salvo que nazcas con ellos, no es posible obtenerlos de ninguna otra manera.
Pero el PE no tiene nada que ver con estos “fenómenos”. De lo que se trata es de mejorar nuestras pollas en tamaño y rendimiento. Cualquier ganancia, por pequeña que sea, da sentido al PE. Pero no solo se trata de aumentar el tamaño (y cuando digo tamaño hablo no solo de longitud sino también de grosor), sino de tener un miembro más potente, con mejores erecciones y que nos permita disfrutar más del sexo, que es lo que nos trae a todos a este sitio.
Si algún ejercicio afecta negativamente al buen rendimiento del pene, olvidaros de él. Yo por ejemplo, comprobé que el hanging se cargaba literalmente mis erecciones, por lo que abandone dicha técnica.
El PE es algo progresivo y que debe ser, idóneamente, una práctica de por vida. No se trata de abandonarlo una vez alcanzadas unas medidas. Eso significaría olvidar una parte primordial del PE que es el mantener un pene en buenas condiciones y a plena potencia a cualquier edad. Biológicamente el pene, con la edad pierde parte de su tamaño y funcionalidad, cosa que se evita ejercitándolo con el PE y jodiendo mucho, por supuesto.
¿Nos gustaría agarrarnos con las 2 manos (una tras otra) nuestras pollas mientras la apuntamos a la vagina de nuestra chica y ver que aún sobresale la mitad de la polla? A mi me encantaría, desde luego. O ver que apenas puede meter en su boca un poco más del glande cuando te hace una mamada.
Por otra parte, también me gustaría tener una cuenta bancaria con millones de euros. Pero, repito, aquí lo que debemos perseguir no es un imposible.
El PE no es solo tamaño, es mejora funcional del miembro, aumentar nuestro conocimiento del mismo y de su fisiología.
No hay ganancias pequeñas, cualquier mejora que consigamos con el PE es un logro SUMAMENTE IMPORTANTE como hombres que buscamos potenciar nuestra sexualidad.
El tamaño importa pero no debe ser una obsesión. Eso es peligroso y frustrante.
Saludos.
